Mundo Butterfly

@mundo_butterfly

lunes, 28 de diciembre de 2015

2016

Cuando era adolescente me hacía preguntas sin hallar respuestas.
Fue pasando el tiempo y yo, como un ave migratoria que no cuenta sus aleteadas. Sin embargo, la estación es el mejor marcador.
Conforme fueron pasando las estaciones, esporádicamente iba superando barreras. Las distancias son inapelables cuando lo que no quieres es entender.
En la primera juventud es difícil tomarse un tiempo para deducir lógicas de tu crianza y sus actores.
"En mis tiempos", como suelen decir los ancianos, huí de mi casa, huí de mi país. Me desbarranqué muchas veces, pero siempre tuve la cerca la voz de los consejos. Esos que llegan sin preconcebir tus defectos o tus errores, pero al fin al cabo son solo eso: consejos porque la vida es experiencia. Sin embargo, también es la ruta que se sigue tan fiel como incierta.
Tal vez hayan más juventudes.
Hoy, tan solo sé que tengo compromisos qué cumplir.
Que ya no puedo huir más, porque aquí: sí soy indispensable. Que las preguntas se fueron contestando con la sabiduría del tiempo y a veces no es necesario más tiempo para pensar en complejo.
Ahora la velocidad va más lento, es cierto; pero hoy disfruto lo aprendido y lo que tengo.
PD. (Sabía que en algún momento de mi vida tenía que llegar este fluir interno)
Feliz Año 2016

jueves, 19 de noviembre de 2015

domingo, 15 de noviembre de 2015

jardín

Los primeros rayos del día penetraban por las cortinas de fino tul. Estas seguían el vaivén del tímido viento que lograba infiltrarse por los pequeños orificios de las ventanas, cuya madera estaba carcomida por el tiempo y por las polillas.

Mis manos se posaron para acariciar las delicadas cortinas. Mis dedos dibujaban sus bordados hechos con caprichosos tulipanes y amapolas.

Entre tanto, el viento peinaba suavemente mi rostro, como invitándome a descubrir lo de afuera.


¡Lo que ví! Un arco iris de geranios, margaritas y claveles; golpeadas por los chorros de agua que brotaban de la manguera. Éstos caían firmes, sin vacilar sobre ellas.   

jueves, 15 de octubre de 2015

¡Por qué insistir en publicar en papel, cuando todo se está volviendo digital!

Crecí en la época analógica, oliendo el papel nuevo de los cuadernos y es natural siempre pensé en publicar en papel. Tengo un blog que me da libertad, pero me da frustración. Cuando ves tu nombre impreso en un libro, la sensación de  lo perdurable te embarga. Tratas de escribir con lo que tienes en la mente y en las venas, con lo que has leído, con lo que has visto y escuchado de tus maestros. Las películas son grandes aliadas en el proceso creativo. Pero sí, me fue necesario publicar en papel por una cuestión generacional.

Aunque el gusto por publicar tenga un costo elevado como comprarte una tv hd. Por eso, en el caso de Es7aciones pasamos por dos ciclos de edición y corrección bajo fechas y plazos precisos mediante cronogramas y plazos fijos.

¿Desde cuándo empieza la aventura de escribir?

Tal vez desde que hay una llama interior que la vas canalizando en cartas, tarjetas… Yo sentí que desde que era adolescente tenía facilidad para escribir cartas y tarjetas dirigidas a mis hermanos que viven en el exterior.

Luego tras dos dècadas decidí asistir a mi primer taller en el 2008 organizado por Petroperú. Los sábados por la mañana era de poesía y por las tardes, de narrativa. Una delicia! Sin embargo, el proceso fue algo aterrador por caer en eso de escribir por la emoción, por el primer impulso, el primer consejo que escuché sobre todo del profesor Cronwell Jara fue el de leer a los universales: Hemingway, Carver, Clarice Lispector, Julio Ramón Ribeyro, Gabriel García Marquez, Faulkner, etc.

Cuando se empieza, se siente bastante inseguridad por la sensación de vacío y el juzgamiento. Existe mucho espíritu critico en los talleres y es difícil superar el sentir hacerlo mal y soportar las críticas. Mas cuando se tienen escritos se empieza a sentir que el tiempo hace lo suyo y  que para la edición es necesario que el texto repose el tiempo que se crea conveniente.

En los talleres se aprende a superar la tolerancia a la crítica. Si tu ego sobrevive a la primera crítica demoledora es que de verdad quieres escribir.
Lo controversial despierta crítica, pasa que los lectores se indignan por un acto de injusticia, de abuso, violencia, etc…





“Crea tu mejor final”

Y aunque hayan pasado todos esos años, durante las noches aún siento mi piel estremecerse con el solo el contacto de sus cabellos. Las cortinas de mi dormitorio bailan con esa corriente gélida que suele acompañarla a su paso. Ese es el frío de los que vagan en el nirvana de las almas sin descanso.

Ella me visita cuando cae el sereno de la madrugada, cuando la luna sobrecoge el rem de mi sueño. Aunque deje la ventana con el cerrojo puesto, ella invade la habitación con su espectro, millones de cabellos plateados quedan regados sobre el piso cerámico. Desde hace 56 años, la eterna novia es mi amante encantada, la que se apodera de mí con sus dominios paranormales. Me habla al pensamiento para que no busque más explicaciones.


Esta mañana al levantarme encontré una nota sobre mi mesa de noche, la tinta aún está fresca y con su puño me dice: Él, ya duerme conmigo.

sábado, 26 de septiembre de 2015

el amor no es de mis especialidades

Solo te pido que si ya te diste cuenta de lo que siento: lo guardes, lo metas en un barril y lo dejes caer en lo más profundo que pueda tragar la tierra.

viernes, 25 de septiembre de 2015

FIL Cusco 2015


II. La historia del cuento puede ser real o inventada. Si es real, debe parecer inventada y si es inventada, real. J. R. Ribeyro

Me tomé estos largos días liberados del vacío que se enfrenta empezar una primera línea. El jueves 3 de setiembre de este año, tuve la experiencia más paralizante al menos desde hace diez años. A las  cuatro de la tarde me senté yo frente a una sala de por lo menos cuarenta asientos y solo, calculo yo, que solo a lo mucho, 20 de ellos estaban ocupados. Eran asistentes aislados, de dos, de tres y varios solos. La poca asistencia a la presentación del libro que tenemos en común, Es7aciones, me hizo dudar del guión que había preparado. Había pensado, por la emoción que llevaba adentro, iniciar el parlamento con un Kausachun Cusco. Definitivamente, un saludo que solo cabía en mi realidad inventada, en mi imaginario había una sala llena, con reflectores, una presentadora vestida como para una noche de gala.

La premisa para empezar un frustrado diálogo con el público fue: ¡Por qué insistir en publicar en papel cuando todo se está volviendo digital!

Crecí en la época analógica, oliendo el papel nuevo de los cuadernos en la escuela y es natural siempre pensé en publicar en papel. Si bien es cierto, tener un blog da libertad, a mí, en particular, me da frustración. Sin embargo, cuando ves tu nombre impreso en un libro la sensación de lo perdurable embarga...

Palabras que solo van más allá a través de este espacio, pero que desde el auditorio Clorinda Matto de Turner solo veía unos corredores casi vacíos, ¿dónde estaban los conocidos o los compañeros con los que solía encontrarme en las ferias de Lima. Poco a poco empecé a notar los pocos interesados en el mundo editorial. Mi inexperiencia me facturó una premisa que luego del shock y ya instalada en la capital, vino hacia mí, las primeras ediciones de ferias son las más paupérrimas; pero loables.

Hoy que asumo la experiencia con el tiempo que siempre hace lo suyo, respondo mi propia disyuntiva con un , me fue necesario publicar en papel por una cuestión generacional. Aunque el gusto por publicar tenga un costo elevado como el de comprarte un Tv Hd.

No obstante, el precio no resulta excesivo cuando los maestros se vuelven consejeros espirituales. Me sentí tremendamente confortada cuando el profesor Cronwell Jara respondió mi mensaje alicaído: "Nunca te preocupen estas cosas. Más importante es tu Obra. Un abrazo. Sigo en Cusco".

Lo cierto es que no fui para nada preparada para factores como: que su ubicación sea en los pisos más escondidos de un centro comercial. Las fallas técnicas fueron lo de menos, mi nerviosismo era tal, que solo me enteré cuando me lo dijeron. Intenté lanzar preguntas, pero el público seguía inerme y eso me aterraba. Me presenté y a los otros autores también, pero mi concepción de libro - producto nunca lo di a notar. Cuando me cae de sorpresa, la nota de: "le quedan cinco minutos"; solo alcanzó mi mente a saludar a una escritora, Karina Pacheco, por ser del lugar y porque su nombre suena más en esta ciudad (Lima); ah y también dije: "Tienen una ciudad muy bella y de una riqueza histórica increíble"...Muchas gracias!

Solo me retiré con cuatro libros menos, los cuales fueron regalados, mi cámara y mis dos amigos que fungieron de promotor y fotógrafo. Si de eso se trata, siempre se aprende.

lunes, 6 de julio de 2015

1 Feria del Libro Independiente en Barranco


El fin de semana del viernes 1 al domingo 3 de julio se vivió en pleno corazón de Barranco, el distrito más bohemio de Lima, una experiencia de reencuentros, abrazos, trueques de libros publicados; además de una oportunidad de aprendizaje al escuchar a los más experimentados. Escribir es una vivencia que cambia la perspectiva de la vida, se hacen amigos, se comparte, tal vez no se gana pero se disfruta!

domingo, 14 de junio de 2015

amor es...


amor, es esa sombra bajo el árbol
que se esconde de espaldas al mundo

el amor es un pensamiento clásico

los cielos pasarán, pero el amor
no pasará de moda

mis peores intentos de amor
han sido fruto de mis deseos más platónicos

lunes, 11 de mayo de 2015

Al final de la calle

Oscar Malca, este es el autor que en los 90's escribió sobre esta Ciudad de M donde corría la droga y se sentían las remecidas del rock. Este es el autor que creó una obra: Al final de la calle y es curioso, porque fue precisamente al final de la calle donde me asaltó la violencia y donde perdí esta obra (una experiencia que forma parte de su mística). El malhechor que se puso frente a mí, de piel cobriza, de mirada encendida, de talla metrocincuenta y tratando de ocultarse con la visera de su gorra Yankee; me decía entre sus muchos "conchatumares, vacea tu bolso", y yo obedecí. Por la ley de la gravedad, por la fuerza de mi nerviosismo empezaron a caer: el ejemplar de edición española (La Fabrica) de Los Cachorros, mis agendas y algunos artículos que terminaron con gotas de sangre impregnadas. Me perdí en el tiempo del asalto como para repensar en su momento que la obra de Oscar Malca no obedeció ni a mi fuerza, ni a la gravedad. En medio del asalto trataba de no moverme, un paso en falso podía ser trágico. Ya había contabilizado discretamente lo que yacía sobre el asfalto, olvidando completamente el libro de Malca en mi bolso. No era para menos, ver sangre correr desencaja a cualquiera. Yo la vi cuando voltee hacia mi derecha, el otro sujeto golpeaba la cabeza de nuestro amigo "que tienes ahí conchatumare", forcejeaba descontrolado. Cualquier movimiento en falso puede costar la vida en una ciudad como ésta, de M. Él solo trataba de proteger su celular (era todo lo que le quedaba). Con hilos de sangre dibujándose por su rostro, desde mi fluir interior alcé la voz: "que más les falta por hacernos". Después de intervenir, sé lo que siente ser valiente y en ese momento faltó lo que creyeron que podía asegurarles el negocio. "dame tu bolso conchatumare". Se lo entregué sin reparos, luego llegaron días de buscar "Al final de la calle" en cuentas de Facebook, en páginas libreras, también tuve que rehuirle al ofrecimiento mercantilista de un librero; decirle que era un libro para devolver a la universidad no fue lo indicado. Bueno, yo imaginé que los libreros llegarían a ser más sensibles que cualquier simple vendedor. Por eso decidí recorrer esta Ciudad de M como a las ocho de la noche por las guaridas de Quilca, lo curioso es que - aunque Quilca sea un paraíso para la piratería- para un libro como el de Malca, solo se camina para conseguir su versión original. Y es que la mística se puede entender desde ahí, desde lo escondido, desde lo anticomercial, desde lo más natural y sensato, como es la siguiente versión: Al final de la calle (2000) Editorial Libros para el desvío.
Desde ese sábado 18 de abril, noche en que perdí aquella edición hasta hoy 29 de mayo y siendo casi la una de la tarde, puedo comentar que este libro me ha atrapado, porque siento que desde los 90's (época en que mi adolescencia se confundía entre coche bombas y apagones) esta ciudad de M sigue inmersa en la violencia y en la sangre. Si tuviera que resaltar los momentos que se relacionan con este factor de la cruda realidad puedo transcribir aquí los siguientes extractos: "[...los dos sujetos  que lo habían empujado al baño lo sujetaban ahora del cuello y los brazos, mientras la voz de Dogo se le estrellaba en la cara. El primer golpe lo había cogido por sorpresa y aún  no llegaba a entender lo que ocurría; su cerebro parecía haberse detenido. Dogo estaba frenético y se dirigía a él amenazándolo  con el puño...Alguien lo ayudó a incorporarse y un nuevo puñetazo lo arrancó de su somnoliento asombro. Fue a dar contra la puerta del baño. Se derrumbó al piso e inmediatamente pensó que de ahí no se levantaría jamás. Error: una mano lo cogió de los cabellos y comenzó a tirar con fuerza, obligándolo a erguir el cuerpo entre cómica y desesperadamente. Cuando estuvo a punto de ponerse de pie por completo, una patada  fue a clavarse en su riñón izquierdo. M se dobló, pero sólo lo suficiente para que un rodillazo lo empalmara en pleno rostro...]
Las calles en esta Ciudad de M se vuelven tierra de nadie: [M volteó y se sobresaltó  al reconocer, a pocos metros de él,  a media docena de los niños que jugaban hacía un rato, acercándose con las sonrisas torcidas - inconfundible síntoma de haber inhalado Terokal -  y algunos cuchillos y piedras en la mano. Silvana lo miró  y se puso de pie alarmada. M hizo lo mismo, a la vez que  empuñaba la botella por el pico. Miró atrás,  tanteando una eventual vía de escape, pero se topó con la amenazante silueta de otro grupo de niños que salía de la oscuridad. Alrededor del parque, las calles estaban desiertas...Sin esperarlos, M se lanzó con todo, repartiendo botellazos a diestra y siniestra, tratando de no hacer caso de los cortes que le desgarraban la ropa y la piel. Se levantó una polvareda, pues peleaban en un sector del parque con muy poco pasto, y la batalla comenzó a desarrollarse en medio de jadeos y gruñidos destemplados. Entre una maraña de bracitos que se batían para clavarle navajas o introducirse en sus bolsillos, M vio que su amiga era presa de cuatro pirañas, que, no sin dificultad, la tenían en el suelo. Ella se defendía - en esa misma fracción de segundo uno de sus agresores acababa de recibir un puntapié en la boca - pero su furia parecía inútil ante la superioridad numérica... Silvana, entre gritos de cólera, se revolcaba en la tierra y trataba de pegarse al muro de la glorieta, con la estrecha falda levantada sobre sus caderas, el polo hecho jirones y los pechos casi al aire (manejando hábilmente filudas hojas de afeitar, los "pirañas" solían cortar la ropa de sus víctimas para así reducirlas con rapidez...]

Estas son algunas líneas creadas por Óscar Malca sobre ese imaginario llamado Ciudad de M, siendo M el personaje central, flotante en medio de una época a la cual me remite mi adolescencia y pasajes de mi vida.



Seguiré caminando en la búsqueda! Espero que también me asalte la casualidad.

domingo, 19 de abril de 2015

Lima se está yendo a la mierda!

Lima se está yendo a la mierda y con los que vivimos en ella, los que trabajamos sin hacer daño a nadie, estamos andando por la ciudad a salto de mata, expuestos a una legión de hombres y mujeres que para gestionar sus vicios se dedican a amenazarnos, encañonarnos y despojarnos de lo que con trabajo compramos. Estamos jodidos en esta ciudad, en mi cuadra asaltan subidos en una moto a cualquier hora del día, , estamos jodidos un sábado que parecía encantador en San Isidro, excepto por el hecho de enterarme que en Camino Real, un poco antes de Dasso, un señor de edad mayor estaba denunciando el robo de su vehículo y que en horas de la noche, nos encañonan a mí y mi grupo de amigos los #yoloterarios, en la calle Cervantes de El Olivar, cuando saliamos del Festival de la Palabra. Lo que estoy contando aquí es cosa de todos los días y a cualquier hora, y sí, es cierto que nuestras noticias se han vuelto un menú de asesinatos, robos y delincuencia a mano armada, pero no es suficiente con anunciarlo. La inseguridad ciudadana se está volviendo un mounstruo que se alimenta con la inoperatividad de las autoridades que se enfrascan en negociados, antes de trabajar en la seguridad.

viernes, 10 de abril de 2015

Se escribe, se intenta, se pone a la mesa


De muchas maneras, este libro es el testimonio de un viaje. Un viaje atípico -como quizá sean los mejores- porque sus siete pasajeros lo emprendieron en condiciones poco favorables: no se conocían entre sí, había muchas diferencias entre uno y otro, y, por si esto fuera poco, ninguno antes de embarcarse había recorrido la ruta que se eligió. Aún así, se lanzaron hacia lo desconocido, acicateados por lo más importante que tenían en común: su cariño por la literatura.

¿Dónde empezó la travesía? Es tanto como preguntarse dónde se inicia un río: en alguna parte y en ninguna, en realidad. Cada una de las palabras e ideas colocadas en este libro tienen un origen complejo, que habría que buscar en la miríada  de experiencias que a cada uno de los autores le tocó vivir: algunos habrán sentido <> desde la primera infancia, otros,  cuando se acercaban a la juventud; unos escribirán para decir algo, otros simplemente porque esa es su forma de gritar. A lo mejor alguno escribe para dejar un mensaje cifrado, dirigido a algún destinatario anónimo. Quien sabe.

No obstante los cronistas concuerdan  -como diría uno de los autores de esta compilación- que este viaje empezó entre agosto y setiembre de 2014, en las aulas donde se dictó el taller de Novela Breve que auspició la Casa de la Literatura Peruana.  Es ahí, en el bullente Centro de Lima, donde convergieron alrededor de veinticinco jóvenes entusiastas por la literatura, prestos a escribir  su primera novela y, entre ellos, siete jóvenes - aunque ellos todavía no lo sabían, pues andaban ensimismados atendiendo las clases o a lo mejor preocupados por sus alumnos de economía, por la factibilidad de un proyecto, por sus correcciones de estilo o por los exámenes del colegio - quienes serán más tarde los autores del libro que tiene en sus manos.

(Extracto de la Presentación de Es7aciones escrito por Julio Avellaneda, autor de Un viejo nos alcanza).





viernes, 3 de abril de 2015

Lo que hace la Focalización

El sol quemaba no solo mi rostro, sino también mi voluntad. No es fácil despegar las pestañas luego de dos días, y seguir respirando en estas cuatro paredes.
¡Quien viene por ahí! Buenos días srta. Ella me pide  que abra la boca y me tome la dosis.
Quiero a mi familia vivir en paz, por eso desde que me trajeron a la cama 309, no me resisto. Pero tras la ventana, la mañana está hermosa, hay un sol de febrero que domina los jardines de afuera. Se siente viento desde aquí, mis cabellos se sienten seducidos a enredarse por sus corrientes. Me pregunto cómo vuelan las golondrinas en un día soleado. Si me aman me encontrarán. El cielo es el camino, es hora...

Miraflores - Instituto Raúl Porras Barrenechea
Lo que hace la focalización en una clase de narrativa de Reynaldo Santa Cruz.

viernes, 13 de marzo de 2015

remar más allá


Luego de la crecida, Ernesto y sus primas se dirigieron a la ciudad, él remaba sobre unos troncos desgastados  y ellas a bordo de la balsa del  tío Virgilio. El pequeño va detrás de ellas, su mirada expresa lo que a su corta edad significa cuidarlas de los peligros del camino. A menudo se escuchan de niñas desaparecidas que caen en manos de algún traficante, muchas son engañadas por un plato de comida. Este no es un día para la escuela, es un día para llegar al mercado, trabajar unas horas y llevar algo a casa para cuando el sol muera en el horizonte. Ese mismo sol que ilumina sus ojos y abriga el calor de un amanecer más esperanzador.

miércoles, 25 de febrero de 2015

Edén



al lado del álamo di mis primeros pasos
al lado del álamo me enredaba con la soga
acariciando la despedida temprana
en un abrir de ojos hacia la eternidad
a diario respiraba la senectud de esas ramas
que tiraban de mí
hacia la melancolía del otoño

en el otoño tenue, sus hojas cubrían las huellas de la soledad
las lágrimas por el padre ausente
no hay trazas de un abrazo
que apague las pesadillas
o un beso a medianoche para cubrir el sueño azul de la niña perdida 
al lado del álamo.












martes, 24 de febrero de 2015

Es7aciones en La Librería Ciro

La idea de ir en sentido contrario a los círculos de poder o circuitos canónicos se va haciendo real. Sin trámites, ni burocracias en la Librería Ciro de Facultad de Letras en la UNMSM esperan varios ejemplares de Es7aciones. Buen viaje! http://libreriasciro.blogspot.com/2015/02/7-estaciones-avellaneda-azanero-robles.html

miércoles, 11 de febrero de 2015

Es7aciones, el primer sueño de papel

La brisa me despeja las ansias de ahogarme, de desdoblarme en un mundo paralelo en el que puedo ser yo. La sensación de flotar por sobre la razón se vuelve un impulso. La libertad "entre rejas" puede sumergirme en estados incontrolables. Busqué escapes que no necesariamente fueron los mecanismos más propios.

domingo, 8 de febrero de 2015

No creo en los santos, no creo en San Valentín

El amor es esa sombra bajo el árbol que se esconde de espaldas al mundo.
El amor es un pensamiento clásico. Los cielos pasarán, pero el amor no pasará de moda por los siglos de los siglos. Amén.
Mis peores intentos han sido fruto de mis deseos platónicos. Aunque sea conciente de que ya no estamos en los tiempos de Dante y que las Beatrices de la Divina están extintas.

viernes, 6 de febrero de 2015

Insomne


Esta noche se me vino el insomnio. Será que aún no baja la temperatura del cuerpo o los índices de adrenalina? Hoy me pasé todo el día pinchándole a esta canción. He sudado bastante por hoy. Trataré de contar elefantitos, abrazada a mi almohada.

martes, 13 de enero de 2015

En Es7aciones, mi primer cuento publicado


En el año 2008, la inquietud por la poesía llegó. En la sala abarrotada de Petroperú, presenté Sorry. Hubo risas en toda la estancia. Tiempo después (2010) mi primer cuento fue sometido al juicio de una escritora española, "Joder, tu historia es muy ingenua". Sentí como si un cañón perforara mi instinto a la hora de enfrentarme al vacío que genera el papel en blanco. Por suerte, en aquel taller del Centro Cultural España, el orgullo propio me lo comí ante quince participantes. Dejé pasar el tiempo y el impacto. Este año (2014) me cayó una noticia que cambió la perspectiva de mis intentos. Considero que el taller en la Casa de la Literatura Peruana ha sido  un lujo, partiendo de la admiración que siento por la escritora que lo dictó, la señora, Carmen Ollé. Hoy, me he dado el placer de pretender contar un poco de ellos, los alter ego de mi historia. Con cariño les dedico El Club.




Es así como he presentado mi cuento: El Club en el libro Es7aciones. Para mí, escribir es un largo proceso, no tanto por el aspecto perfeccionista sino porque me demanda enfrentarme a un espejo vacío que es el de plasmar mi mundo mental en palabras. Después de esta primera experiencia editorial, me robo un poco de tu tiempo para comentarte que si deseas leer esta propuesta mía, solo tienes que escribirme y convenimos para que puedas adquirir este libro de cuentos. También puedes leer: Un viejo nos alcanza de Julio Avellaneda, Serenata para Sofía de Johanna Azañero, Kawsaqi Wayra, Viento amigo de Luz del Alba Hidalgo, El silbido de Karla Baldeón, Una noche estrellada de Alfredo Zapata y John Titor de Yared Medina.

Gracias por tu tiempo!

Bang, bang estás muerto: el juego mortal de un adolescente

Estamos inmersos bajo la ley del gatillo. De la ficción (no tan irreal) estamos frente al escenario para ver la propuesta adaptada que tiene...